La tentación Bach

Una de las consecuencias del movimiento historicista es hacer pensar que alguna música está reservada a ciertos músicos y no a todos. Esa idea está tan anclada ya que incluso hoy me parece extraño oír las interpretaciones de Furtwängler o de Klemperer de algunas obras de Bach, con gran orquesta « moderna ». 

Esto suena lógico hoy, tal vez nos han impuesto esa idea sectaria de que solo unos pocos están llamados a tocar cierta música, esto para vender más tal vez. Pero en realidad la partitura está ahí, la música de los antiguos nos pertenece a todos y no está mal tocar lo antiguo con una mirada actual. Y no me parece reprochable interpretar lo que los antiguos escribieron por medio de los instrumentos con que contamos hoy, con lo que tenemos a disposición. Tampoco me parece que esté mal ni reprochable tratar de acercarse al sonido de la época. Pero a esto último le concedo un valor exploratorio, casi lúdico, sin descartar tampoco que puedan llegarse a resultados mágicos.

Como lo menciono, a mí hoy me parece extraño saber que algún músico no especializado en música antigua publique una grabación tocándola. Y vice versa, parece extraño que el que es conocido por tocar música antigua resulte publicando algo por ejemplo del siglo 20. Me parece extraño pero en realidad no debería sorprender, sino que debería tomarse con más naturalidad, creo yo.

Por ejemplo algunos de los pianistas más famosos, que en realidad no son intérpretes de Bach, se han dejado tentar y han publicado unos discos con su música. En algunos casos los resultados son milagrosos, en otros no tanto. En algunos casos, los músicos deciden renovar la experiencia publicando más grabaciones, en otros casos deciden no hacerlo.

Quisiera mencionar los siguientes pianistas, que han grabado cosas de Bach pero que en realidad no se hicieron famosos por Bach ni su nombre se asocia inmediatamente a Bach: Argerich, Brendel, Pollini, Ashkenazy, Aimard, Grimaud, Trifonov y Barenboim.

INCOMPLETISTAS

Empiezo por Martha Argerich. Creo que cualquier humano que oiga el escaso Bach que ha grabado Martha Argerich se pregunta por qué no grabó más Bach. 

De hecho me pasa algo similar con Alfred Brendel, sin embargo el repertorio de Brendel me parece más cercano y consistente que el de Martha. Con cercano y consistente me refiero a los compositores a los que se dedicó Brendel y la forma de abordarlos. En efecto Brendel se dedicó a compositores extremadamente relevantes como Beethoven, Schubert, Mozart, algo de Schumann, Brahms y no tantos más; mientras que Martha en realidad no se dedicó a ningún compositor en especial, sino que mezcla « algo » de Beethoven, Ravel, Bartok, Chopin, muy poco Brahms, Prokofiev, Schumann, Rachmaninov, Tchaikovsky y algunos otros, pero con obras aisladas. Y con eso de “algo” viene mi más grande desilusión con Martha, y es que no fue completista nunca, pero fuera de eso no grabó lo esencial de varios compositores. Por ejemplo me aterra que solo se haya dedicado a los tres primeros conciertos para piano de Beethoven, pero sobretodo a los dos primeros, que son geniales si no conociéramos los últimos dos. También me aterra que no haya grabado ninguna sonata para piano de Bethoven. Tremenda pianista cómo no graba el quinto concierto de Beethoven y al menos una de sus sonatas! Pues no. De ahí mi desilusión. En cambio Brendel fue más consistente: al menos grabó todos los conciertos y todas las sonatas de Beethoven. Y lo que más me desilusiona es que en realidad esos dos pianistas no son de la misma categoría, no son tan comparables: considero a Brendel un súper pianista, realmente top, pero es que Martha es una verdadera extraterrestre. Pues bien ambos grabaron un Bach absolutamente exquisito, pero muy escaso (un disco cada uno). Una verdadera lástima. En una entrevista de 2016 a Brendel, pocos meses después de su retiro definitivo de la escena (porque anunció retiro varias veces) en la que le preguntan por qué había grabado solo un disco de Bach, él explica que nunca tuvo la intención de hacerlo pero que resultó en el estudio de grabación justo después de haber practicado algo de Bach y que lo tenía en los dedos en ese momento. Valiente explicación !

Adoro a Helene Grimaud, qué pianista. Le sigo su carrera desde su impresionante disco Water, luego del cual decidí adquirir todas sus grabaciones. Incluso leer todos sus libros. Sin embargo, lastimosamente solo ha grabado un disco de Bach. Lástima. Es un disco exquisito como todo lo que ha grabado, desde sus años Denon. Grimaud se identifica mucho con Brahms. Este compositor es como su centro de gravedad, su polo a tierra, expandiendo un poco hacia atrás hasta Beethoven (pasando por Schumann y Chopin) y un poco hacia adelante hasta Rachmaninov, el cual siempre ha sido importante en su repertorio. Ha habido algo de Mozart y últimamente se ha dedicado a Silvestrov, compositor aún vivo. Pero de Bach un solo disco, lástima porque es un discazo, con extractos de ambos libros del Clave bien temperado, el concierto para piano número 1 y algunos famosos arreglos de Busoni, Liszt y Rachmaninov. Es decir uno queda totalmente iniciado, porque nada está completo como tal. Muy al estilo de lo que grabaron Brendel y Argerich. Creo que para un coleccionista esta es la peor opción: nada está completo!

FUGAS IMPROBABLES

Antes de 2021 parecía improbable que Daniil Trifonov se metiera alguna vez con Bach. De hecho su repertorio va de Chopin en adelante, con un Rachmaninov muy potente y convicente y algunos rusos como Stravinsky, Prokofiev y Scriabin. Pero en 2021 sacó un disco llamado The Art of Life, tocando obras de Bach y su dinastía. Creo que lo más importante es lo del propio JS Bach, porque grabó todo El Arte de la Fuga. Trifonov es un pianista impresionantemente virtuoso. Sin embargo, en su Bach hay algo que no me convence. Tal vez sea solo yo, pero me parece un Bach muy violento tal vez, muy percusivo. Incluso creo que lo que ha grabado de Chopin peca un poco por lo mismo. No sé, en todo caso me atrae bastante menos que varios otros pianistas para el mismo repertorio. Hace poco sacó un video del concierto Bach en la Philharmonie de Berlín, y me convenció bastante más, sin que en mi mente se acerque a un Schiff, a un Perahia o a una Nikolayeva para Bach.

Si miramos el repertorio de Maurizio Pollini, difícilmente hubiéramos podido decir que incluiría a Bach en algún momento de su carrera. En efecto, Pollini armó un repertorio de Beethoven en adelante, con pilares como el mismo Beethoven, Chopin y Schumann. Antes de 2010 parecía improbable que Pollini grabara algo de Bach. Pero su CD doble del libro 1 del Clave bien temperado es simplemente exquisito. A diferencia de algunos comentarios negativos que he leído, me encanta cómo se deja llevar, tarareando en algunos pasajes. En los pasajes en los que debe ser frío y mantener un tempo de manera rígida lo hace muy bien, pero en otros se oye su vena romántica. Me parece que esa dosificación es realmente convincente y le viene muy bien a esa obra. Desde que oí por primera vez esa producción me capturó y me convenció completamente, por su claridad, su emoción, su virtuosismo no demostrativo y por el magnífico sonido, cristalino, con el que se grabó. Creo que varios nos quedamos esperando el segundo libro… lástima.

LA ISLA DESIERTA

Conocí a Pierre-Laurent Aimard con su disco inaugural para Deutsche Grammophon del Arte de la Fuga de Bach. 

Inmediatamente me enteré que ese tipo de música no hacía parte de su repertorio habitual. Era difícil no enterarse porque fue una especie de escándalo : Aimard era conocido y se había vuelto famoso por su repertorio moderno, pero para el primer disco con Deutsche Grammophon decidió grabar algo de Bach. Qué pensar de eso? Tal vez era un golpe comercial? O tal vez quería desmarcarse de una vez por todas de esa clasificación de pianista de obras contemporáneas solamente? En todo caso ese disco es realmente de mis preferidos de mi discoteca, es de esos de llevarse a la famosa isla desierta, una joya. Desde ese momento soy fan de Aimard, siguiendo toda su producción desde sus años Sony, pasando por la DG hasta sus últimas producciones para el sello Pentatone. Pianista increíble. Luego de algunos años desde el lanzamiento de ese primer disco para DG, Aimard volvió a Bach con el primer libro del Clave bien temperado el cual, si se compara con el del Arte de la Fuga, en efecto puede desilusionar. Pero en realidad no sabría decir por qué, tal vez solo sea la calidad de la grabación. 

O sea Aimard puede ser un pianista de música contemporánea puro y duro pero lo que es cierto es que conoce muy bien su Bach, no hay duda. Eso lo hace de los pianistas que más respeto hoy. Es un poco como Dalí, que aunque pone por delante su estilo surrealista, en todos sus cuadros queda claro que sí sabe pintar, no como otros de la misma época. Eso me convence.

SONIDO ORQUESTAL

Barenboim nunca ha sido considerado como especialista en la música de Bach. Ha grabado muy poco como pianista, aunque no tan poco como Pollini ni los que mencioné antes. Barenboim grabó las variaciones Goldberg y los dos libros del Clave bien temperado, y en mi conocimiento nada más. 

Hace poco me di cuenta del valor de estas interpretaciones de Barenboim: lo que oigo en estas grabaciones es que Barenboim « cuida » mucho cada voz, distingue de manera muy marcada cada línea melódica y guarda la misma intensidad y el mismo carácter para cada una de ellas de principio a fin. Creo que esto es único, no se lo he oído a ningún otro pianista, al menos no tan marcado ni coherente. Yo creo que él se imagina que cada línea melódica es algo así como un instrumento o un grupo de instrumentos dentro de una orquesta. Como siempre para Barenboim, aunque su Bach no es tan placentero como el de otros pianistas, sus decisiones artísticas son irreprochables.

PREDESTINADOS

Aunque Ashkenazy ha recibido varias críticas desfavorables con sus discos de Bach, la verdad me gusta bastante en este repertorio. Yo conocí a Ashkenazy con el triple CD con los dos libros del clave bien temperado. En realidad lo compré porque me parecía buen negocio tener ambos libros del Clave bien temperado en tan solo 3 CDs, en vez de 4, como la mayoría de grabaciones. Ese album me pareció un acierto. Luego decidí seguirlo en los discos de Bach que publicó, y me encanta. Aunque no es un bachiano confirmado como tal, ha publicado bastantes más discos que los otros pianistas que comento arriba. Su Bach es un poco frío, un poco neutro, sin competirle a Gould ni a Pollini. Pero a veces pienso que a veces es necesario oír Bach así, desnudo, sin ningún carácter definido. 

Hay un último pianista que quiero mencionar aunque no se encuentra en la lista inicial. Es un caso particular porque hoy es considerado un intérprete confirmado de Bach, pero al comienzo de su carrera estaba bien alejado de ese repertorio. Él empezó con un repertorio clásico/romántico y se le conocía por sus grabaciones de los conciertos para piano de Mozart. Se trata de Murray Perahia. Llegó a Bach durante una convalecencia por la cortada del pulgar con una hoja de papel que no cicatrizaba y que lo obligó a dejar de tocar durante más de un año, a comienzos de los años 1990s. Al salir de esa convalecencia, Perahia empezó a grabar Bach llegando a grabar discos ya legendarios como el de las variaciones Goldberg. Hoy Perahia es un bachiano confirmado, pero en realidad no estaba originalmente predestinado para eso.

Seguramente dejo de lado varios pianistas que no son bachianos pero que han grabado algo de Bach. Los que menciono son los que mejor conozco. Tiendo a pensar que Bach es un paso obligado para cualquier pianista. Y considero de una calidad diferente aquellos pianistas que se han atrevido a grabar Bach, en contraste con aquellos que no lo intentaron nunca. Es algo así como un sello de calidad.